16/11/10

En busca del papel adecuado


Muchas veces sucede que jugamos un papel. Sí, como si estuviéramos en una obra de teatro. La obra es la vida y el escenario es el amor. Subimos ahí, nos ponemos el mejor maquillaje, repasamos el libreto y salimos a escena. Nos enfrentamos cara a cara con el público. Nos creemos dueños de todo, creemos que saldremos a llevarnos todos los aplausos. Pero no tenemos en cuenta que ahí en el público, está el director y que al lado nuestro hay otros personajes.
Sucede esto lector: yo soy una actriz. Yo subí al escenario creyendo que el amor no podía conmigo. Interpreté mi mejor obra. Rechacé los mejores papeles y la única obra que creí saber interpretar, me superó y el público no reaccionó como yo quería.
Pero dejemonos de metáforas. Basta de fingir. Basta de idealizar y esperar el momento perfecto, esa llamada, esa cita, esa frase que nunca nos dijeron.
Esta enamorada que les escribe, les cuenta desde su propia experiencia que buscando al chico ideal, dando vueltas en la misma histeria que siempre la caracterizó, se quedó esperando para ver si todo surgía. Las cosas no salieron como lo planeó y siguiendo el consejo del que dirán y el de su propio orgullo, dejó pasar otra oportunidad y quizás la que más valía.
Cuenteme usted, actor, ¿Alguna vez le pasó?